septiembre 11, 2024
enfermedad mortal

La ehrlichiosis canina, o ehrlichiosis, es una enfermedad mortal e infecciosa causada por la bacteria Ehrlichia canis y afecta principalmente a los perros.

Para propagar enfermedades, las bacterias y microorganismos necesitan un intermediario. En este caso, la garrapata Rhipicephalus sanguineus también se conoce como garrapata marrón del perro. Este parásito se alimenta de la sangre de los perros infectados y transmite la enfermedad mortal al morder o comer a otros animales. En raras ocasiones, también se puede transmitir a través de una transfusión de sangre. La detección y el tratamiento tempranos son importantes, ya que la infección puede durar semanas o volverse crónica y causar problemas a largo plazo.

¿Qué síntomas provoca esta enfermedad mortal?

enfermedad mortal

La ehrlichiosis o ehrlichiosis en perros consta de tres etapas. La primera fase, o fase aguda, ocurre después de un período de incubación que dura de 8 a 20 días. Después de este período, los síntomas aparecen y pueden durar unos 15 días.

Durante este período de 2 semanas, los perros pueden mostrar fiebre, debilidad, pérdida de apetito, petequias, ganglios linfáticos inflamados o signos neurológicos. Esta etapa generalmente ocurre en primavera y otoño cuando los ácaros son más abundantes.

Después de la fase aguda, el perro puede recuperarse por completo o pasar a la siguiente etapa de la enfermedad mortal, la fase asintomática. No hay síntomas en esta etapa, pero el patógeno tampoco se elimina. Esta etapa puede durar años, pero aunque el animal no se enferme, puede seguir transmitiendo bacterias a través de las garrapatas.

Después de un período asintomático, seguido de un período indefinido, se inicia una fase crónica, con muchos otros síntomas, como petequias, hemorragias nasales, mucosas pálidas, pérdida de peso, depresión, trastornos graves de la coagulación y lesiones oculares. Aparecen síntomas graves. Inflamación, dolor articular, cojera, sangrado, signos neurológicos como falta de reflejos, edema de las extremidades posteriores o del escroto, insuficiencia renal o infecciones secundarias a un sistema inmunitario debilitado. Si no se trata a tiempo, esta etapa puede ser fatal.

¿Existe una cura para esta enfermedad mortal?

 

Sí, es muy eficaz cuando se trata de forma aguda. El tratamiento, en todas las etapas, es la doxiciclina, un antibiótico que puede matar la E. canis o Ehrlichia dura unos 15 días, pero se recomienda un tratamiento de al menos 21 días.

Las infecciones agudas desaparecen rápidamente y son igualmente efectivas en estadios asintomáticos y crónicos, pero con peor pronóstico. Además, es probable que el tratamiento se complemente con vitaminas y minerales debido a la anemia durante la enfermedad, e incluso los perros requerirán transfusiones de plasma.

Después de seis meses, un ensayo clínico debería confirmar que el tratamiento funcionó. Los pastores alemanes y los dóberman pinscher son propensos a esta enfermedad mortal.

¿Cómo prevenir esta enfermedad mortal?

enfermedad mortal

Debido a que no existe una vacuna para esta enfermedad mortal, es una enfermedad difícil de diagnosticar, especialmente en la etapa asintomática, y los síntomas son similares a otras enfermedades, la mejor medida preventiva es mantener a tu perro libre de garrapatas. Para ello, puedes tomar las siguientes precauciones:

  • Revise a los animales antes y después de caminar.
  • Evite caminar entre arbustos húmedos, especialmente durante la temporada de pulgas.
  • Cepilla el pelaje de tu perro con regularidad.
  • Use productos para el control de plagas con regularidad.
  • Use un collar antiparasitario y reemplácelo cuando lo recomiende el fabricante (generalmente cada 6 meses).
  • Use desinfectantes ambientales en los lugares que frecuenta su perro, como camas y patios, para eliminar las garrapatas.

Mantener a tu perro alejado de las garrapatas no solo previene la ehrlichiosis, sino también otras enfermedades transmitidas por este parásito, como la babesia, la enfermedad de Lyme, la fiebre de las Montañas Rocosas y la anaplasmosis.