octubre 10, 2024


No Conformidad Menor: ¿Qué son y cómo corregirlas?

Las No Conformidades Menores son situaciones en las que se incumplen los requisitos de calidad, pero no implican un riesgo elevado para el bienestar del paciente o usuario del servicio. A pesar de no tener un impacto directo en la seguridad, las No Conformidades Menores pueden afectar negativamente la calidad de la atención y el rendimiento de los procesos clínicos. De ahí que sea importante identificar las No Conformidades Menores y corregirlas de forma eficaz para optimizar el funcionamiento de la empresa y mejorar la satisfacción del paciente.

Con este objetivo en mente, este artículo explorará en detalle qué son las No Conformidades Menores, cómo se identifican, y cuáles son las técnicas recomendadas para corregirlas.

1. ¿Qué son las No Conformidades Menores?

Las No Conformidades Menores son aquellos incumplimientos de los requisitos de calidad que no acarrean un riesgo inmediato o grave para el paciente o usuario del servicio. Por tanto, se considera que este tipo de incumplimientos tienen un impacto de menor relevancia para la salud y la seguridad del paciente en comparación con las No Conformidades Mayores.

Algunos ejemplos de No Conformidades Menores en un ambiente hospitalario podrían ser la falta de cumplimiento con los protocolos de limpieza en las habitaciones, el uso de equipos médicos caducados o la falta de una adecuada identificación de los pacientes. Aunque este tipo de incumplimientos no perjudican directamente la calidad de la atención, su presencia continua puede afectar negativamente la percepción del servicio por parte del paciente y disminuir la calidad de la atención de manera general.

2. Cómo identificar las No Conformidades Menores

Para identificar las No Conformidades Menores se requiere de una auditoría o seguimiento sistemático y programado, que permita evaluar el cumplimiento de los requisitos de calidad. Idealmente, este proceso deberá involucrar a todo el personal del centro hospitalario, desde los profesionales de la salud hasta el personal de apoyo, con el fin de obtener una visión global del funcionamiento del sistema.

Existen diversas herramientas de gestión de calidad que apuntan a identificar las No Conformidades Menores. Un ejemplo de una herramienta efectiva es el uso de listas de verificación (checklists) que permiten al personal identificar posibles incumplimientos en las áreas críticas del proceso. Otras herramientas son la aplicación de entrevistas a los trabajadores y usuarios, la medición de indicadores de calidad y la realización de observaciones directas de los procesos.

3. Procedimientos de corrección de las No Conformidades Menores

Una vez identificadas las No Conformidades Menores, se deben implementar acciones correctoras efectivas que permitan volver a cumplir con los requisitos de calidad y evitar su reaparición en el futuro. A continuación, se presentan algunos de los procedimientos que se pueden utilizar para corregir las No Conformidades Menores:

– Acciones de corrección inmediata: estas acciones se llevan a cabo antes de que se forme la No Conformidad Menor y tienen como objetivo evitar su aparición. Ejemplos de este tipo de acciones podrían ser recordatorios de limpieza, la colocación de etiquetas de identificación en los equipos o la implementación de un sistema de seguimiento de pacientes.

– Acciones correctivas de seguimiento: estas acciones se realizan para seguir el progreso de la No Conformidad Menor después de su identificación y con el fin de evitar que vuelva a ocurrir. Este tipo de acciones pueden incluir la implementación de un sistema de monitoreo de la calidad, la realización de capacitación periódica sobre las políticas de calidad y la revisión regular de los procedimientos de trabajo.

– Planes de mejora continua: esta forma de enfoque permite a los empleados y gerentes identificar problemas recurrentes y trabajar en soluciones que mejoren de manera continua los servicios y procesos del hospital. Algunas de las técnicas utilizadas en planes de mejora continua son los grupos de mejora, análisis de procesos, brainstorming, entre otras.

– Acciones disciplinarias: en algunos casos, la no conformidad menor puede ser consecuencia de una falta de cumplimiento por parte del personal. En estos casos, la imposición de medidas disciplinarias puede ser necesaria para combatir la recurrencia de la No Conformidad Menor.

Conclusión

En última instancia, la aplicación de técnicas efectivas para la identificación y corrección de las No Conformidades Menores en el ambiente hospitalario debe de ser entendida como una parte integral del programa de calidad y seguridad. Su gestión efectiva puede no solo mejorar la calidad de la atención y el rendimiento de los procesos, sino también aumentar la satisfacción del paciente y mejorar la reputación de la organización. Por tanto, la identificación y corrección de las No Conformidades Menores es una práctica importante para cualquier entorno clínico.